12 junio 2017--El Observatorio Latinoamericano sobre Trata y Tráfico de Personas (ObservaLAtrata) celebró en Lima este junio pasado su V Congreso Latinoamericano Sobre Trata y Tráfico de Personas, en el que se dieron cita más de 121 representantes de sociedad civil, gobierno, academia, organismos internacionales y personas afectadas por este delito que lacera las sociedades de latinoamericanas.
Organizado por el Instituto de Democracia y Derechos Humanos de la Pontificia Universidad Católica de Perú (IDEHPUCP), en conjunto con Capital Humano y Social Alternativo (CHS Alternativo), los expertos concluyeron que es imperativo robustecer la lucha contra esta problemática y fortalecer la promoción y protección de los derechos de las personas afectadas.
En representación del capítulo dominicano de ObservaLAtrata, la investigadora asociada de OBMICA, Camila Belliard Quiroga, describió el contexto de la trata de personas y tráfico ilícito en, hacia y desde el país, manifestando que “es una problemática que está ligada a diversas aristas, desde el tráfico transfronterizo en la frontera con Haití, la situación de irregular de inmigrantes haitianos en el país, la violencia contra las mujeres y el abuso de niños, niñas y adolescentes (NNA), entre otros”.
En cuanto a la situación regional, el ObservaLAtrata señaló como obstáculos a superar, primero, la falta de presupuestos asignados a las instituciones estatales que están llamadas a combatir el flagelo y, paralelamente, las dificultades para su ejecución, en los escasos casos donde existan esas partidas. Además, las complicidades o corresponsabilidades de los funcionarios y autoridades del Estado con el sujeto activo del delito.
ObservaLAtrata, que se reunió en la Pontificia Universidad Católica del Perú, en la ciudad de Lima, también manifiesta que la falta de mecanismos de información, sensibilización y prevención efectivos; la inaplicabilidad de los protocolos de actuación y los modelos de atención por los operadores de justicia y las instituciones de protección y asistencia a víctimas respectivamente; y la corrupción y la impunidad en los estados también ocasionan lastres para el combate contra la trata.
Belliard manifiesta que “es fundamental realizar un trabajo integrado entre instituciones del Estado, sociedad civil y ONG ́s realizando campañas y programas educativos en torno a la trata y tráfico basados en la investigación”.
Como cada edición, este año el congreso propició la contribución de aportes colectivos desde la investigación, formación e incidencia para las políticas públicas, en aras de luchar contra la trata y tráfico de las personas, y poner en acción la agenda de los trece capítulos nacionales, de los dos grupos promotores, y las tres redes regionales que integran el ObservaLAtrata.